Siendo Franco una figura excepcional y árbitro de su régimen, sin que tuviera sucesor a su altura, los políticos del franquismo buscaban, con diversas opciones, cómo podría evolucionarse sin traumas a un régimen democrático convencional, aunque algunos pesaban conservar el franquismo tal cual: 237 – ¿Cómo cambiar el régimen de Franco? | El mundo checkista – YouTube
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Charlatanes y leyes sovietizantes
El año pasado por estas fechas publicaba en este blog la serie “Galería de charlatanes”, que abarcaba desde Joseph Pérez a Ángel Viñas, pasando por Preston y tantos más. Alguno me reprochó entonces que tratara de ese modo a historiadores muy reconocidos, con currículos impresionantes y grandes premios oficiales. Para entender el asunto, deben tenerse en cuenta dos cosas: a) las leyes soviéticas de memoria, que casi todos se esforzaron en sustentar intelectualmente o, en el mejor de los casos no les han hecho oposición alguna, lo cual ya les define; y b) la distinción entre enfoques y detalles. Sin duda muchos de los que llamo charlatanes han hecho estudios más o menos acertados sobre cuestiones parciales o de detalle, pero si, como han hecho casi todos, enfocan la historia reciente de España con el enfoque de que la guerra civil enfrentó a demócratas republicanos con fascistas o reaccionarios, ya todo va mal, por mucho que acierten en tales o cuales detalles. Lo mismo cuando la historia de España, en general, se distorsiona mediante “metodologías” marxistas (las he llamado lisenkianas en honor al ilustre biólogo soviético Lisenko, que casi arruinó la agricultura de su país), o más o menos basadas en la leyenda negra. En tal caso, los estudios o aportaciones parciales se vuelven poco significativas. Julián Marías lo expresó perfectamente en su España inteligible (de enfoque tan distinto de los disparates historiográficos de su maestro Ortega): estudian la época de la hegemonía española destacando los rasgos que la habrían hecho imposible. En otras palabras: esos autores pueden ser maestros en asuntos parciales, secundarios o de detalle, pero indudables charlatanes en los principales, los de enfoque general.
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¿La Colmena, mejor novela española?
Si entendemos La colmena en clave política, como retrato de un ambiente de ruindad, miedo, pobreza e hipocresía beata bajo un régimen opresivo, entonces no se trata de una buena novela, sino de propaganda disfrazada de literatura. Pero si la entendemos como un retrato de situaciones existentes en todas las sociedades, en otras palabras, como reflejo de situaciones humanas universales dentro de su variedad, es una de las mejores descripciones que se hayan hecho en la literatura española, y probablemente no encontraremos en el siglo XX o lo que va del XXI otra comparable. Es fácilmente imaginable, por ejemplo, una novela actual que describiese los mundillos de la droga, la prostitución homosexual o general, mezclada con la vida periodística y política (de hecho, la novela negra suele jugar con esas bazas). No sería una descripción de la sociedad actual, pero sí de aspectos significativos de ella. Fácilmente imaginable, digo, pero muy difícilmente realizable a la altura de la obra de Cela. También en Nada y otras encontramos reflejos parecidos, pero mucho más desvaídos, y a menudo empeorados por finales artificiosos.
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Tersites o “un malestar en la cultura”
Odiseo entendió muy bien el meollo del discurso de Tersites, más allá de la ofensa que hacía a un solo jefe, Agamenón. Acababa de increpar a los aqueos que huían: “sois inútiles y cobardes, de poco seso para hablar en la asamblea. No pueden ser reyes todos los aqueos, no es bueno que muchos manden, sea rey solo uno, al que Zeus otorgó el cetro y las leyes”. De modo que se dirigió indignado a Tersites: “Parlanchín sin juicio, aunque seas orador brillante, no pretendas disputar con los reyes ni los injuries ni trates de regresar, , pues no hay mortal más vil que tú. No sabemos cómo volveremos, si vencidos o victoriosos, y tú te mofas de Agamenón porque recibe presentes de los héroes”. Y le amenazó y golpeó con el cetro. Los demás se rieron del humillado Tersites aunque, sutiliza Homero “con pena”.
Freud hablaba del “malestar en la cultura” ocasionado por una represión sexual inevitable para mantener la sociedad en paz. Tersites expresa aquí otro aspecto de ese malestar, el ocasionado por el poder. Su propuesta no va solo contra Agamenón, implica la anarquía, la revancha de quienes han de someterse a un poder inevitable para mantener el orden, la misma cultura, entre las diferencias y oposiciones de intereses propias de la sociedad humana. A pesar de que Homero se ensaña con Tersites, empezando por su apariencia física, el personaje no deja de suscitar simpatía. Por necesario que sea el poder, siempre tiende a la tiranía, y aun en los casos más benévolos disgustará a muchos su peso.
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¿Genocidios humanitarios?
**”Senadores useños preparan borrador para declarar las acciones de Rusia en Ucrania como genocidio” Las cifras de ese “genocidio” son muy bajas, pero las acciones de Usa en Serbia, Irak, Afganistán, Libia o Siria han causado cientos de miles de muertos y millones de desplazados). ¿Debemos considerarlas operaciones humanitarias? ¿Quizá genocidios humanitarios?
**La actual ola de incendios forestales, que no es la mayor registrada en España ni mucho menos, tiene claros orígenes políticos: la política “ecologista” basada en al “cambio climático”. Un “científico” cantamañanas (los hay en abundancia, basta leer las noticias) afirma que este verano caluroso “será el más fresco que soportemos en lo que nos queda de vida”. ¿Por qué no se hace un recuento de las profecías de tales científicos desde hace cuarenta años, por ejemplo? Como no se hace, pueden seguir haciendo “ciencia”.
**Ponen a una tal Lilith Verstringe como secretaria de no sé qué. Tiempo de locuelas. El secretario anterior, abogado del narcoterrorismo colombiano, decía que podría asesinar a la familia real, si se daban las condiciones. La Lili tiene también ideas claras: “la cultura del esfuerzo genera fatiga y ansiedad”. Desde luego: con lo bien que se está chupando del dinero público, que, como decía otra de su cuerda, “no es de nadie”…
Esa no me la sabía
https://www.larazon.es/sociedad/20220523/daugztjzczfbxf6crcijkgemby.html?outputType=amp
Tremendo el link de Lasperio.
Supongo que en el futuro se llevará una cuidadosa contabilidad de los casos eutanasiados. Valorados con varias estrellas. A mas ruin el caso (y lo son todos) mas estrellas. Si se tratara de un adolescente en la flor de la vida y con perfecta salud etc punturá mucho mas.
Y en finción del botín obtenido los bancos centrales concederan créditos blandos a los gobiernos de turno.
Los culpables de que no se den esos créditos en la cantidad en que el lanar los demande serán los que no se dejen matar, debiendo hacerlo porque el resto del lanar así lo ha señalado.
No se si alfinal habrá incluso canibalismo. Para que no sufran las pobres y escasas vacas que queden.
¿Se habrá completado el círculo?
Los aztecas dirían que si. O igual no.
“Blas Piñar fue barrido porque era un hombre honrado en un país que se empezó a llenar de chaqueteros y de sinvergüenzas. Si él hubiera sido presidente del gobierno, nos habría ido mucho mejor. Pero el pueblo español es así de olvidadizo. Y los del Concilio Vaticano II eran unos cabrones de mucho cuidado”
Esta es la capacidad de análisis político de la extrema derecha, pura puerilidad. No puede extrañar lo que ha pasado, en gran parte culpa de ella. Ni entendían la democracia (la rechazaban), ni entendían el propio franquismo ni entendían la situación creada por el franquismo ni entendían el significado del referéndum del 76. La cuestión es que ellos eran muy “honrados”, pero al parecer bastante torpones.
“Y sí, el tiro salió por la culata. Excepto a los de ETA, por desgracia.”
Sí, llevamos 40 años de dictadura de la ETA con una “Euskadi” independiente. De todas formas, qué le vamos a hacer, Franco eligió a Juan Carlos y Torcuato a Suárez, Menudo par de ineptos, Franco y Torcuato. Ah, si Blas Piñar hubiera gobernado, con lo “demócrata” que era… Pero se ve que de tan honrado no supo bandearse en la nueva situación. Él quería vivir en la anterior, de “los principios del Movimiento”, un movimiento que era simplemente un ministerio burocráticos con escaso presupuesto. Al final, esta gente se aisló ella sola, y solo le queda llorar porque fuera de ellos todo el mundo es sinvergüenza y chaquetero, y el pueblo por ahí se va. Nada que hacer. .
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Siempre se habla de Europa en lugar de la UE. Una usurpación más.
En la historiografía de izquierdas se ensalza unas veces al Ejército Popular de la República como una institución heroica y cuajada de jefes talentosos, fueran profesionales como Rojo o “salidos del pueblo”, como Modesto, y siempre superiores a los contrarios; lo cual no ayuda a explicar su derrota final. Otra tendencia describe dicho ejército con pocos y en general mediocres jefes y mandos intermedios, lo cual no aclara cómo pudo aguantar casi tres años, aunque, en compensación, permite achacar a Franco incapacidad militar, por no haber vencido en unas pocas semanas. Ambas versiones suelen insistir en la inferioridad material del Frente Popular, cosa, a su vez, difícil de entender cuando éste disponía de casi toda la industria militar y civil, y de todas las reservas financieras del país.
Saltan a la vista las incoherencias a que dan lugar esas versiones, no obstante lo cual ha cobrado vuelo últimamente la idea de una “república” en permanente inferioridad armada, gracias al libro de G. Howson sobre la ayuda exterior a las izquierdas hispanas, y a algunos datos del libro España traicionada. Pero el libro de Howson ha sido cumplidamente refutado por especialistas militares españoles como J. Salas y A. Mortera, y las interpretaciones de España traicionada sobre algunas irregularidades comerciales soviéticas, resultan, en este caso, un tanto forzadas.
Para situar el problema en su verdadera dimensión conviene seguir la evolución de dicho ejército. Cuando, desde el 19 de julio de 1936, el gobierno izquierdista reparte las armas a las masas, no sólo se hunden los últimos restos de legalidad republicana, sino también el ejército. El gobierno retuvo casi toda la aviación y la marina, las industrias, la mayor parte de las fuerzas de seguridad y casi la mitad del ejército de tierra. Pero se le ocurrió licenciar a las tropas de todas las unidades en que hubiera habido algún conato de rebelión, a fin de dejar a los rebeldes sin soldados. La medida salió al revés. Como tales conatos, aunque vencidos en su mayoría, habían ocurrido en casi todas partes, la tropa en la zona izquierdista se fue a sus casas (y después, observa Zugazagoitia, mostró nulo interés por reincorporarse), y en cambio no ocurrió nada así en el campo rebelde, pese a suponerse que en él los soldados, “hijos del pueblo”, estarían ansiosos de rebelarse o desertar.
Entonces las fuerzas izquierdistas cobraron un acentuado tono miliciano, operando los mandos profesionales como asesores. La mezcla del ardor revolucionario con la pericia de los profesionales debía destrozar a los rebeldes, considerados oficiales rutinarios e ineptos al frente de tropas descontentas. Sin embargo volvió a ser el bando rebelde el que manifestó una increíble capacidad de resistencia, incluso en condiciones desesperadas, como en Oviedo, Gijón, Toledo, Teruel, Huesca, etc., mientras los izquierdistas eran batidos una y otra vez por las pequeñas columnas de Franco. Esto se ha explicado por la indisciplina de las milicias, pero debe recordarse que éstas tenían siempre el refuerzo de amplios contingentes de guardias civiles y de asalto, bien entrenados, y también de tropas y mandos regulares.
Así, en contra de todas las expectativas, a los dos meses de guerra los rebeldes parecían próximos a ganar la guerra, y hasta los anarquistas hubieron de resignarse al cambio de orientación propugnado desde el principio por los comunistas: crear un auténtico ejército regular. La alternativa fue imponiéndose desde septiembre, y se hizo arrolladora con la llegada del armamento y el consejo soviéticos. Stalin, dueño de las reservas financieras españolas, y por tanto del destino del Frente Popular, presionó sin concesiones en pro del nuevo ejército.
Y éste, lógicamente, debió mucho a la inspiración soviética, apartándose por completo del diseñado por Azaña cinco años antes. La URSS y los comunistas pensaban aplicar en España la experiencia del Ejército Rojo, que en la guerra civil rusa había derrotado a los ejércitos “blancos”, mandados por la flor y nata de la oficialidad zarista y apoyados por Inglaterra, Francia, Usa y Japón. La fórmula de aquella victoria había sido una combinación de disciplina férrea, politización intensísima, y uso de buen número de antiguos oficiales zaristas, obligados o ganados políticamente, junto con la promoción de jefes salidos del “pueblo”, y destacados por su talento natural.
La fórmula del nuevo Ejército Popular de la República fue la misma: serían promovidos dirigentes militares del “pueblo” (Líster, Modesto, el Campesino, etc.) y utilizados al mismo tiempo numerosos oficiales “burgueses”: contra lo que muchos siguen creyendo, no menos de 5.000 de ellos sirvieron en el Ejército Popular (otros 1.500 fueron fusilados o asesinados), y lo sirvieron bien, como indica la alta proporción, un diez por ciento, de los que dieron su vida por la causa. Estos oficiales estaban vigilados por un cuerpo de comisarios políticos, encargados también del adoctrinamiento revolucionario de los soldados. Además se crearon órganos de espionaje y control, que alcanzarían su máxima dureza y profesionalidad en el SIM (Servicio de Investigación Militar), creado por Prieto a instancias de Orlof, el enviado de Stalin que había organizado en España la policía política soviética, NKVD, al margen del gobierno español. El SIM, señala Jesús Hernández (entre otros muchos) “era omnipotente. Ante ella temblaban políticos y magistrados, soldados y generales. Una acusación de sospechoso o desafecto al régimen, ejercía fulminante acción sobre el individuo que, sin defensa alguna ni defensor que se atreviera a hacerla, podía ser asesinado en una mazmorra o asesinado a tiros en la cuneta de cualquier carretera”.
Paralelamente, la disciplina fue asegurada mediante un endurecimiento del código militar hasta extremos de terror. Pues, en contra también de la leyenda, y como señala el mismo Azaña, las deserciones se hicieron pronto muy abundantes. Por una deserción podían recibir graves castigo (trabajos forzados, por ejemplo) no sólo los padres y hermanos del desertor, sino hasta familiares en tercer grado.
Estos métodos tienen inconfundible cuño stalinista. También se atribuyen a los consejeros soviéticos la adopción de la “brigada mixta”, gran unidad básica del nuevo ejército, aunque R. Salas Larrazábal la cree, no muy convincentemente, de origen español. El trabajo de organización fue enorme, y de él resultó una fuerza capaz de defender Madrid, de frenar a su enemigo en el Jarama y vencerle en Guadalajara, poniéndole en serios aprietos con ofensivas como las de Brunete, Belchite, Teruel o el Ebro. Su debilidad principal nacía de la influencia anarquista y socialista, que los comunistas no lograron doblegar por completo, aunque sí reducir mucho, pero aun así no era en lo más mínimo un ejército de broma, y vencerle exigió de sus contrarios un esfuerzo ingente.
En cuanto a medios materiales, la abrumadora superioridad izquierdista al comienzo de la guerra se reprodujo durante la batalla de Madrid, en noviembre del 36, menguando luego hasta desaparecer en octubre de 1937, al caer el frente del Cantábrico. Con todo, esta catástrofe fue en buena medida superada, y la inferioridad material izquierdista no llegó a tomar las proporciones abrumadoras que suele creerse, hasta finales de 1938, después de la batalla del Ebro, y mucho más tras la pérdida de Cataluña. En ese momento los nacionales pudieron desencadenar una gran campaña de aniquilamiento total contra un Ejército Popular a su merced, pero Franco se contuvo, favoreciendo la descomposición del mismo, para concluir sin apenas bajas la última campaña de la guerra.
Gerald Howson Armas para España
El libro Armas para España, de G. Howson ha merecido el elogio de Santos Juliá en El País. Para Juliá, dicho libro obligaría a reescribir gran parte de la guerra civil. El Frente Popular habría sido estafado sistemáticamente por la URSS y por otros países, que le vendieron armas inservibles a precio abusivo. “A base de vender basura a los españoles a precios exorbitantes, fuimos capaces de restablecer la solvencia del banco polaco”, dice un agente de este país. De esta forma, el Frente Popular habría sufrido una enorme inferioridad material frente a los suministros alemanes e italianos al bando contrario.
Los datos de Howson, dice éste y cree buenamente Juliá, tienen “enormes implicaciones políticas”. Demostrarían, en concreto y contra lo que habían mostrado los hermanos Salas Larrazábal, cómo la No Intervención asfixió al Frente Popular, en vez de mantener el equilibrio de los suministros. Sin embargo, el sentido común indica otra cosa: la principal implicación política no sería esa, sino una estupidez increíble de los llamados republicanos, capaces de comprar basura a precio de oro, mes tras mes y año tras año. Tenían que perder la guerra, y muy merecidamente. Lo inexplicable entonces es cómo resistieron casi tres años. Howson, asombrosamente, llama “honradez” a esa extrema necedad. Pero incluso esa honradez-tontería queda desmentida por las denuncias sobre el cúmulo de corrupción que rodeó las compras de armas. Léase, por ejemplo, El oro de Negrín, de Olaya.
Una mínima cautela crítica indica que los datos de Howson no pueden ser completos, pues los documentos ya conocidos sobre recepción de material en España no pueden dar cifras inferiores a las listas soviéticas. Y así lo prueba Artemio Mortera en un demoledor artículo en la Revista de historia militarde este mes. Las armas enviadas por Rusia, sobre todo, no fueron inferiores, en cantidad ni en calidad, a las de sus contrarios, los cuales apreciaron en sumo grado muchas de ellas. Hacia el final de la guerra, en torno a una cuarta parte de las fuerzas del bando nacional estaban armadas con material capturado: “El Ejército Popular de la Republica se había convertido, junto con Italia y Alemania, en uno de (sus) grandes proveedores”. Mortera deja en clara también la pobre competencia de Howson en materia técnica, y sus frecuentes errores sobre la calidad del material.
Sin embargo trabajos serios como éste pasan inadvertidos para el gran público, mientras que las audacias de Howson y la credulidad de Juliá dan la impresión de sentar cátedra. Así estamos.
Tanto esa matanza como las de Madrid, Barcelona, Bilbao, etc., nacieron del odio, un odio difundido sistemáticamente por las izquierdas, y no, o apenas, por las derechas. Y el terror derechista fue de respuesta a las agresiones y al terror izquierdista previos y practicados, con mayor o menor intensidad, durante toda la república, no a la inversa. Espinosa, y tantos de su tendencia, desvirtúan estos hechos, me cuesta creer que por ignorancia, a fin de explicar lo ocurrido en Badajoz como algo monstruosamente inusual, causado por la vesania de una caterva de oligarcas, espadones y clérigos que odiaban al “pueblo” y atacaron a un gobierno “legal y democrático”.
Ahora bien, aunque el contexto explicativo sea falso, podría ser fiable la investigación concreta. Esto no parece fácil, pues Espinosa y compañía no trabajan tanto por esclarecer los hechos como por demostrar la maldad incomparable de los “fascistas”. Y, en efecto, es fácil percibir varios puntos débiles en su estudio La columna de la muerte.
La matanza de Badajoz por excelencia, la que dio la vuelta al mundo, fue la supuestamente ocurrida en la plaza de toros el día 15 de agosto, descrita en el diario madrileño La voz: “Cuando Yagüe se apoderó de Badajoz (…) hizo concentrar en la Plaza de Toros a todos los prisioneros y a quienes, sin haber empuñado las armas, pasaban por gente de izquierda. Y organizó una fiesta. Y convidó a esa fiesta a los cavernícolas de la ciudad, cuyas vidas habían sido respetadas por el pueblo y la autoridad legítima. Ocuparon los tendidos caballeros respetables, piadosas damas, lindas señoritas, jovencitos de San Luis y San Estanislao de Kostka, afiliados a Falange y Renovación, venerables eclesiásticos, virtuosos frailes y monjas de albas tocas y miradas humildes. Y ante tan brillante concurrencia fueron montadas algunas ametralladoras…”, con las que habrían masacrado a entre 1.500 y 4.000 prisioneros, según versiones, entre aplausos y griterío de los espectadores. En algunas variantes, muchos presos habrían sido toreados, etc.
Espinosa admira lo “muy bien escrito” que está el artículo de La voz, una pieza brillante en la siembra de odios con que a cada paso topamos. Pero él mismo debe reconocer que se trata de una falsedad. No existió tal fiesta. Sin embargo tal falsedad no deja de tener un valor para el columnista del enredo: “la [matanza] de Badajoz había trascendido y se había convertido en paradigma de lo que el fascismo representaba”. Y el consuelo es fácil: “la fiesta, como toda reducción (¡!) colmó el imaginario colectivo por contener todos los ingredientes necesarios. Al fin y al cabo ¿qué si no una gran orgía de sangre fue lo que los grupos sociales y económicos amenazados por las reformas republicanas (…) hicieron con esa izquierda extremeña eliminada en masa?” En fin, asegura, la inventada fiesta fue, de todos modos, poca cosa al lado de lo realmente ocurrido, y los militares, aunque no presidieran el supuesto jolgorio, eran “capaces de presidir cosas mucho peores que aquella corrida, y sin duda hubieran ocupado un lugar preferente en un posible Nuremberg español. De ahí quizá el arraigo de una historia como la fiesta” (p. 211-2)
El arraigo no viene de ahí, desde luego, sino de una masiva e inescrupulosa propaganda que intenta continuar Espinosa, cuya calidad moral e historiográfica brilla en estos párrafos. Y sigue brillando cuando pretende justificar como respuesta a las matanzas de Badajoz las perpetradas por las izquierdas en la Cárcel Modelo y las de Paracuellos, en Madrid, “momentos cruciales de violencia revolucionaria”, asegura. Y comenta: “Por más que lo negaran, esa cadena de violencia favorecía los intereses de los golpistas, que así podían justificar su plan de exterminio y al mismo tiempo mostrar al mundo las pruebas del terror rojo”. Espinosa vuelve a mentir. El terror izquierdista tenía ya una terrible trayectoria antes de julio del 36, como hemos visto, y a partir de esa fecha, sin esperar a ninguna violencia derechista, se ejerció de forma masiva y entusiasta, con la seguridad de que, ganada la contienda, la historia lo justificaría, como predicaba Largo. Decir que aquellos asesinatos revolucionarios “favorecían los intereses de los golpistas” es bellaquería muy propia, la hemos oído al PNV en relación con el terrorismo etarra y el PP.
Pero, aunque no fiesta, Espinosa sostiene que hubo matanza en la plaza de toros, y por ello se indigna ante su demolición, pues debiera haberse conservado como eterno recordatorio del crimen. Se apoya para sostenerlo en Southworth, un propagandista similar al mismo Espinosa, aunque, lamenta éste, no dedicara a Badajoz “la extensión y profundidad que dedicó a Guernica”. La comparación tiene interés, manifiesto en esta observación de Jesús Salas Larrazábal: “Quien tenga probada paciencia puede estudiar los orígenes del mito de Guernica en las 109 páginas del capítulo primero de La destrucción de Guernica, en las que [Southworth] va exponiendo, una tras otra, las noticias que publicó la prensa mundial en base a los cables enviados desde Bilbao por los cinco corresponsales extranjeros allí destacados. Los que afronten esta lectura podrán conocer insignificantes pormenores pero, por mucho que relean las densas páginas, no serán capaces de hallar rastros de lo más esencial: los relatos de la prensa de Bilbao, numerosa entonces y, hay que suponerlo, mejor informada. Nadie considere esto como un incomprensible olvido de cronista tan minucioso, pues existe una explicación mucho más lógica: los periodistas de Bilbao no comulgaron con las extravagantes tesis de los contados corresponsales extranjeros que fabricaron la leyenda y no quisieron ver publicados datos que podían ser refutados fácilmente por los evacuados de Guernica”. El examen de esa prensa, y la intensa investigación documental y sobre el terreno han permitido a Salas rebajar a 120 la cifra de víctimas real del bombardeo. Son muchos muertos, pero los creadores del mito necesitaron multiplicarlos por 13, hasta 1.600, e incluso hasta 3.000.
Es un método de Southworth, muy del gusto de Espinosa: si una patraña o una exageración se repite cientos de veces, un seudohistoriador puede seguir el rastro de esas repeticiones y variaciones, y dar al lector desapercibido la impresión de estar leyendo un trabajo concienzudo. Pues bien, Espinosa se basa también en los despachos de los corresponsales Mario Neves, Marcel Dany, Jacques Berthet o Jay Allen. Se trata de testimonios bastante diferentes entre sí, cosa en principio comprensible… excepto en un punto, que expongo así en Los mitos de la guerra civil: “Sin embargo en la plaza de toros no hubo tales matanzas, al menos el día 15 de agosto, como asevera el mito, ni el siguiente. Podemos tener razonable seguridad de ello por el testimonio del izquierdista portugués Mario Neves. El 15 [tras haber oído rumores de matanzas en aquel lugar] escribe: Nos dirigimos enseguida a la plaza de toros, donde se concentran los camiones de las milicias populares. Muchos de ellos están destruidos. Al lado se ve un carro blindado con la inscripción “Frente Popular”. Este lugar ha sido bombardeado varias veces. Sobre la arena aún se ven algunos cadáveres. Todavía hay, aquí y allá, algunas bombas que no han explotado, lo que hace difícil y peligroso una visita más pormenorizada”. Al día siguiente, movido por los insistentes rumores, vuelve al lugar y encuentra el mismo panorama. Nada de fiesta, desde luego, pero también parece difícil fusilar en masa en un lugar con bombas sin estallar.
Esto, naturalmente no lo cita Espinosa, que en cambio quiere dar crédito a Neves cuando, muchos años después, pretenderá respaldar a los otros corresponsales “agraviados por la visión atroz de los cuerpos extendidos en la plaza de toros” o por “la presencia de los desgraciados que aguardaban en los chiqueros” (lugares estrechos donde cabe ciertamente poca gente). ¿Cómo es que él no vio en 1936 los cientos o miles de cuerpos en el coso? No lo explica, sino que intenta desviar la cuestión afirmando que le impresionaron más los cadáveres “dispersos por la ciudad”. Cosa increíble, desde luego. Mal que le pese a Espinosa, el testimonio fiable es el de Neves de 1936, y no el de los años ochenta, cuando el mito había crecido hasta convertirse en dogma de fe, que él intentaba respaldar “para descargo —decía— de su conciencia”.
Lo anterior hace difícil creer, por decirlo suavemente, la matanza en la plaza de toros. Pero ¿significa eso que no hubo matanza? En modo alguno. La hubo, o, mejor dicho, hubo varias aunque de forma más dispersa y, por así decir, vulgar. ¿Cuántas fueron las víctimas? Según los datos de A. D. Martín Rubio y F. Sánchez Marroyo, a partir de los registros civiles y del cementerio, pueden estimarse, hasta fin de año, entre 500 y 1.500, una represión sin duda larga y despiadada. Pero Espinosa eleva la cifra a unas 7.000, integrando, desde luego, los caídos en combate y a otras víctimas en diferentes años. No está en mis posibilidades contrastar esos datos ni los métodos empleados, pero advertiré que, vistas las desvirtuaciones tan frecuentes en el autor, y su evidente deseo de revolver bilis, sus datos ofrecen el mayor margen a la desconfianza. Otros podrán hacer sobre el terreno las comprobaciones pertinentes.
Cosa no fácil, porque los trabajos de historiadores como Francisco Moreno Gómez sobre la represión en Córdoba, por ejemplo, verdaderos panfletos en la vía de Tuñón de Lara, han dado lugar a una floración de otros parecidos en buena parte del país, subvencionados a menudo por ayuntamientos, y órganos administrativos izquierdistas. Su metodología es tan peculiar como la de Espinosa, pero denunciarla causa a muchos verdadero temor, por verse señalados localmente como “fachas” o cosa parecida. Sin embargo, algunas personas en las localidades tendrán que irse animando a revisar toda esa siembra de odios.
Juliá dice en su artículo de elogio a Espinosa en Babelia: “Los cerca de 7.000 asesinados por la “columna de la muerte” quedan reducidos [en Los mitos de la guerra civil] a unos cuantos centenares, nada de lo que admirarse, como aconseja el autor, horrorizado, esta vez sí, por la matanza en la cárcel modelo de Madrid”. Juliá falsea las cosas una vez más, siguiendo su mal método. Los cientos de muertos en Badajoz, como en tantos otros lugares, me parecen una atrocidad, pero no pierdo el tiempo en poner poses de indignación ni en aconsejar admirarse ni horrorizarse para despertar con tales trucos la “mala leche”. Mi posición ha sido en todos lo casos buscar los hechos y las raíces de ellos. Y la raíz fundamental, insisto nuevamente, está en el odio sembrado a conciencia por las izquierdas durante toda la república. Sería bueno que todos aprendiésemos del pasado, pero son demasiados los que persisten, aún hoy, en la misma actitud.
D. Pio, mi impresión es que el ejército blanco no recibió apoyo significativo de las potencias europeas. Aparte de otros fallos en coordinación y propaganda. Y es comprensible que de polacos, por ejemplo, no le viniera apoyo a un ejército considerado como Zarista. (Por más que no siempre lo fuera. Creo que Denikin era republicano).
Buenas tardes Don Pio.
Se que no es un estudio sistemático, pero aunue sea testimonial lo que cuenta Orwell en su homenja a Cataluña, en cierta manera me parece que avala su tesis.
Orwell comentaba lo mal armados y alimentados que estaban en el frente versus lo que veía en manos de los comunistas cuando estuvo en Barcelona.
Por otro lado yo he oido varias veces la tesis de que el Ejercito del Frente Popular estaba tan convencido de que iba a ganar la guerra (para eso la promovió) que prefirío que cobrara cierto pulso que “legitimara” la espiral de odio con la que pudo sin problemas poner en manos de esos criminales toda esa destruccion (chekas, fusilameintos indiscriminados, guerras internas contra el POUM o anarquistas..) y descuidó la oraganizaciñon de un ejército verdaderamente profesional y no político.
Un cordial saludo
El terrible de Cartago (1967)… qué pesados con Usa… se supone que es una comedia..
¡¡¡ Chicago, joder !!! ¡¡¡ Y es una comedia, sí, y española, cojones !!!
Desde la Agencia Tributaria se imparten en colegios y universidades cursos de lo que llaman ” Educación cívico Tributaria “. Se trata de inculcar a los jóvenes la complacencia en el pago de impuestos como bien social. Luego organizan un concurso de redacciones y a la alumna – siempre es alumna- mejor adoctrinamiento le dan un diploma y se va tan contenta.
Los compañeros dicen a los que organizan los cursos ” estáis haciendo una labor magnífica “.
Otro compañero llamó a la radio para pedir que eliminasen las ofertas del día sin IVA, porque tal cosa no existe, e induce a la evasión fiscal.
La Agencia Tributaria está superpoblada de funcionarios que nobpegan ni chapa, que cobran por preparar la promoción a una escala superior. La inmensa mayoría simpatizantes del PSOE o similares, y, menos mal, algunas chavalas jóvenes y guapas.
Muy curioso que la estación 3194U de Ciudad Universitaria en Madrid, donde está la sede de la AEMET, tiene muchos problemas con los termómetros. Empezó a registrar datos el 1 de enero de 1972. El primer año que pudo registrar temperaturas diarias sin fallar un día fue 1973. Hasta 1984 funcionó correctamente. Fue su último año. Hasta la actualidad no ha completado un año completo. El último mes que pudo funcionar durante todos los dias del mes fue marzo de 2021.
”Ejercito del Frente Popular (-…) descuidó la oraganizaciñon de un ejército verdaderamente profesional y no político”
Por eso a los inútiles de Franco y los suyos les llevó tres años derrotarlo. .
En general la extrema derecha o fachas tiene tanta retórica como incapacidad política y pasividad.
Vuelvo a decir que los fachas no somos “extrema derecha”. Y ni somos retóricos, ni somos incapaces, ni pasivos.
¡¡¡ YA ESTÁ BIEN !!!
Los servicios de suscripción dejan tanta pasta que la codicia ha movido a algunas empresas de ramas ajenas a la informática y el entretenimiento a sumarse a la movida. Es el caso de BMW. Los señores le metieron suscripción mensual a la opción de que se active un artefacto que te calienta el asiento. Vaya cosa que les compras el artefacto que, para que sea funcional, hay que estar alquilando.
¿Cómo sería el mismo negocio en el caso de McDonald’s?
Los nazis te llevaban al matadero contra tu voluntad. Los anglosajones le han metido mercadotecnia: ahora eres tú quien desea acceder a la posibilidad de ir al matadero. Pagando incluso.
En el terror rojo el odio estaba mucho más acusado. Era algo que habían hecho madurar mucho más. Esto es indiscutible. Se ve claramente en las torturas, verdaderas crueldades que buscaban la deshumanización de la víctima, su humillación final.
Anda, que si en el lado nacional se hubieran llevado a cabo las torturas aberrantes que se daban en el otro lado, como por ejemplo las continuas, generalizadas amputaciones de testículos a las víctimas, habría que ver entonces los libros de los sembradores de odios, con lo dados que son al embuste y la truculencia. Para eso tendrían que escribir libros explicando lo que hacían ellos, los antepasados ideológicos de los Francisco Moreno, Espinosa Maestre, etc..
Apreciado Don Pio
“Por eso a los inútiles de Franco y los suyos les llevó tres años derrotarlo. .”
Una de las claves, en mi humilde opinión, de por qué le llevó tanto tiempo a Franco ganar la guerra es porque no quería una política de tierra quemada. No quería ganar sobre un solar. Parecido a lo que les pasas a los rusos en Ucrania. Completamente diferente a lo que hace la OTAN allí donde pone el ojo.
Un solar no solo genería un desastre económico, sino uno social. Sería mucho mas difícil reunificar la nación. De hecho uno de los motivos por los que la OTAN y cía hacen lo que hacen es para que no haya una sociedad consolidada, con raices en lo que hubo antes. Para así poder conformar lo que venga después con mas facilidad de acuerdo a sus intereses. Otra cosa es que lo consigan.
Y como ha señalado usted con mucho acierto lo mas complicado vino de fuera, una vez ganada la guerra, por lo que pasó con la IIGM. Reconstruir un país con ese handicap exterior no era fácil. Pero no creo que fuera, precisamente, culpa de Franco.
Problema que no tendrá Rusia en Ucrania, porque los chinos estarán encantados de “echar una mano”.
Un muy cordial saludo
“Una de las claves, en mi humilde opinión, de por qué le llevó tanto tiempo a Franco ganar la guerra es porque no quería una política de tierra quemada. No quería ganar sobre un solar”
Es decir, cuanto más durase la guerra, más entera y menos “solar” quedaría España. Quién lo diría. Franco quiso hacer de necesidad virtud cuando comentó a un embajador italiano, creo recordar, que no tenía prisa, porque debía pacificar la retaguardia, cosa que se ha interpretado de diversas formas. El hecho real es que le costó mucho ganar la guerra, que le interesaba hacerlo cuanto antes, porque su prolongación podía dar lugar ala intervención de Francia (que hizo planes al respecto), y que enfrente no solo tenía a los cantamañanas anarquistas, azañistas y socialistas y separatistas, sino también a los comunistas. Que estaban dirigidos por los rusos, los cuales habían ganado una guerra civil extremadamente difícil, en la que habían estado muy cerca de ser destruidos. Al revés que sus cantamañanescos aliados, los comunistas tenían una estrategia política y militar muy bien diseñada. El problema del frente popular fue que los comunistas, aunque se hicieron hegemónicos partiendo de una situación muy secundaria, , no pudieron dominarlo por completo. Aunque la estrategia (brillante) de Stalin iba más allá de que el frente popular ganase. Su principal objetivo al alargarla, incluso cuando podía darse por perdida, era arrastrar a Francia e Inglaterra al choque con Alemania, utilizando a España de cebo. Esto estuvo muy lejos de conseguirlo.
En cuanto a las comparaciones de Putin con Franco… Siempre hay semejanzas con cualquiera en tales o cuales aspectos. Pero Franco tenía, en general, tan poco que ver con Putin como la situación de España con la de Rusia.
Un general inglés que fue a aplastar la revuelta de las trece colonias que formarían Usa, dijo que pensaba castrar a todos los useños, a unos por la fuerza y a otros convenciéndolos.
Efectivamente, como dice don Pio el Ejercito Popular no era de broma, en ocasiones estaba mejor armado que el nacional y estaba dirigido, como en Madrid, por profesionales del ejército español. Salas Larrazábal da el mérito a los profesionales españoles en la defensa de Madrid. Y no sólo eso, sino que no pinta un “paseo militar” de Franco el llegar hasta Madrid. Las columnas nacionales se enfrentaban cada poco a una gran resistencia, en alguna ocasiones mal organizada, anárquica pero potente que les impidió llegar a Madrid de forma fácil.
Como cuenta Queipo de LLano en sus memorias, en Andalucía formó varias compañías de carros rusos T27 que había capturado en los que pintó una bandera de España, la bicolor para poder diferenciarlos. Franco se los pidió para atacar Madrid.
Como denuncia Moa, en la derecha existen tantos tópicos como en la izquierda. ¡O más! Franco no quería una guerra de tierra quemada, los otros eran unos inútiles. Franco más. O gobernó España como “un cuartel”, etc…así es imposible.
No cabe duda que en el bando del Frente Popular, los asesinatos y crímenes se cometieron con más saña que en el contrario. Sólo hay que leer las crónicas y lo que pasó en los barcos prisión del puerto de Bilbao para comprobar los pocos escrúpulos que tenían los milicianos socialistas a la hora de torturar y asesinar a los prisioneros, muchos de ellos curas o chavales sin afiliación política o falangista. Les hacían comer sus heces, les apagaban los cigarros en su cuerpo, o les disfrazaban de formas grotescas obligándoles a abjurar de la Fe católica. Como se negaban, les humillaban a la vista de la sociedad burguesa de Bilbao, casi toda del PNV y muy “católica”. El espectáculo alcanzaba su punto más álgido cuando al fusilar en las cubiertas, estas se llenaban de sangre lo que hacia resbalar a los milicianos. Esto sólo en Bilbao, que aún hubo más….mucho más.
La toma de Badajoz fue difícil y costosa. Es complicado y temerario, creo que lo señala Salas Larrazábal, parar el avance para “hacer una fiesta en la Plaza de toros” es temerario e irresponsable aparte de ser mentira. El temor a una contraofensiva era real, las tropas nacionales apenas pararon la actividad y siguieron su avance. La represión la cometieron aquellos que se quedaron, como cuenta Moa, pero llegar al imaginario grotesco de una “fiesta”…desmentida por Neves in situ….en fin…
Confirman hasta qué punto son sospechosos muchos datos climaticoalarmistas las informaciones que Manolo viene dándonos.
No era excepción lo de mi ciuddcita.
Parece ser que hay una consigna en los medios por la cual se tiene que silenciar a VOX. Ni hablar bien ni mal. Sólo obviar que existe. En Antena3, grupo pepero, no mencionaron ayer nada de VOX con respecto a los incendios u otras noticias de actualidad. Nada. Voy a buscar algo que se ha dicho por parte de VOX y veo que Garcia Gallardo, el de Castilla y León, ha sido muy claro al decir: “Hay que hacer una limpieza de los bosques y montes en invierno”…..es decir, lo que casi todos los expertos, ingenieros Agrónomos o de Bosques, más ecologistas algo sensatos vienen diciendo. ¡Que este verano hace mucho calor! Si, nadie lo niega, pero que los incendios han sido más virulentos por culpa del ecolojetismo, casi nadie sensato y con cierta formación lo duda.
Esta mañana, en el programa de EsRadio sobre el Campo, no me acuerdo del nombre del programa, hablaron varios expertos del sector. Una de ellas era una catedrática de la universidad de Oviedo en ingeniería de Montes la cual dijo que “la sociedad actual se está dejando engañar por las ideologías y que se han impuesto políticas basadas en esa ideología que impiden actuar en los bosques y montes para la limpieza y la explotación, además de que impide que la forestación en España sea ordenada y se encauce para incluso, obtener recursos naturales, como el combustible biomasa que puede darnos muchos ingresos y ser una solución energética”. Y es que además, lejos de desertizarnos, como alarman algunos, parece ser que el bosque en España está aumentando pero de forma desordenada, y de ahí la virulencia de los incendios. Somos el tercer país de Europa, según está catedrática y otros expertos, con mayor densidad o extensión forestal.
El programa al que hago referencia es “En clave rural”:
https://esradio.libertaddigital.com/en-clave-rural/
https://youtu.be/K_6tAfFAqdw
Los incendios de este año son más peligrosos, más voraces, no por el calor, que es similar al de otros años. Una vez iniciado el incendio, no importa ya si la temperatura ambiente es de 40 grados o de 39. Es más peligroso porque en su camino, las llamas se encuentran más cantidad de ramas y malezas que no deberían estar allí, lo que le sirve de combustible para avanzar más rápido y destruir más.
La deuda y el euro
https://youtu.be/CWMYMAYt8gM
Franco tuvo mucho mas mérito del que le entienden sus partidarios. Sin él, el cuatripartito que era de hecho el régimen, se hubiera deshecho ya en los años 40. recuerden las maniobras de los monárrquicos juanistas. Incluso Serrano súñer proponía sacrificar a la Falange para hacerse perdonar por los vencedores de la SGM. Franco mantuvo a la Falange, pero no como el partido del estado, ni siquiera como el principal, que nunca lo fue.
En cuanto a la guerra, fue mucho más inteligente, militar y políticamente, que los demás.
Muchos dicen que la entrada de España en la UE y en el euro fue un gran acierto. El resultado ha sido una economía sobreendeudada, entre otras cosas. Que amenaza la estabilidad de la propia UE, aunque no tanto como la de Italia
Los méritos de Franco siempre excederán cualquier estimación, tanto de sus partidarios como de sus no partidarios. Pero mejor ser partidario que no serlo.
Hablando de otra cosa: si ahora España se saliera de la Unión Europea (cosa poco probable), se supone que tendríamos que volver a la peseta, ¿no? ¿Y no sería eso un poco follonero? (Pregunto, no afirmo.)
Los británicos fueron muy listos: al entrar en la UE mantuvieron la libra esterlina.
El trabajo de Allen, pura propaganda bajo disfraz informativo, debe entenderse en la situación del momento. Las noticias sobre el terror izquierdista, y especialmente la reciente matanza de la cárcel Modelo de Madrid, se habían extendido por el mundo y desacreditado profundamente al Frente Popular. Contrarrestar aquellas noticias exigía una invención realmente “fuerte”, que demostrase que los nacionales eran mucho más bestiales en su lucha contra “el pueblo trabajador y su gobierno legítimo”. El mito recibió un refrendo posterior, para consumo de historiadores y periodistas incautos, por parte de John Whitaker periodista amigo de Allen, y del mismo jaez.
Según Whitaker, Yagüe le habría confesado en una entrevista: Claro que los fusilamos. ¿Qué esperaba? ¿Suponía que iba a llevar cuatro mil rojos conmigo mientras mi columna avanzaba contra reloj? ¿Suponía que iba a dejarlos sueltos a mi espalda y dejar que Badajoz volviera a ser roja? Estas frases, mil veces repetidas, no tienen pies ni cabeza en términos militares, y supuse que serían algo parecido a la “confesión” de Franco de estar dispuesto a exterminar a media España. Pero el libro de Pilo, Domínguez y La Iglesia termina de aclararlo: la confesión de Yagüe, ciertamente sensacional si fuera veraz, no apareció en ninguna entrevista de Whitaker por entonces, sino que el sagaz periodista la “recordó” seis años después en la revista Foreign Affairs. Y no hay constancia de que Whitaker hubiera entrevistado a Yagüe.
Después, el mito siguió rodando… ¡hasta hoy mismo! Se atribuye a Goebbels el dicho de que una mentira tiene que ser muy grande para ser creída. La de la matanza de Badajoz viene a ser un modelo del “Himalaya de falsedades” que denunciaba el socialista moderado Besteiro de su propio partido. Un historiador himalayesco local, Justo Vila, aporta sus particulares adornos: Hubo moros y falangistas que bajaron a la arena para jalear a los prisioneros, como si de reses bravas se tratase. Las bayonetas, a modo de estoque, eran clavadas en los cuerpos indefensos de los campesinos (…) Luego abrían juego las ametralladoras. “Se calcula” que más de 4.000 personas perecieron en las tristemente famosas matanzas de la plaza de toros. Esto, escrito en 1983. Otros, como Reig Tapia, hablan de 1.200 así asesinados. Preston cuenta 2.000, otros “matan” solo a 500, etc. Está claro que la izquierda no quiere desprenderse bajo ningún concepto de la supuesta matanza, tan útil para impresionar a incautos y presentarse como “representante del pueblo trabajador”, tan horriblemente ultrajado por los “criminales y cavernícolas explotadores”.
Después de libros como Los mitos, el citado de Pilo…, de los trabajos de A. D. Martín Rubio y otros, ya no es tan fácil hablar con tanta desenvoltura de la plaza de toros, por lo que, sin reconocer abiertamente su falsedad, se trata de desviar la atención sobre los cadáveres tendidos en las calles o quemados en el cementerio (para evitar epidemias, en aquellos calurosos días), etc. Así, Martínez Reverte habla con cierta vaguedad de “2.000 personas asesinadas en 24 horas” o se refieren al “elevado número de milicianos fusilados en muchos lugares dispersos de la ciudad”. La realidad es que la toma de la ciudad costó numerosas bajas a las tropas de Yagüe, y por supuesto, también a los milicianos, por lo que varias calles quedaron sembradas de cadáveres, lo que tiene muy poco que ver con la masacre que se pretende.
En cuanto a los fusilamientos, quizá algunos centenares, debe señalarse que los milicianos no eran considerados combatientes regulares sino algo parecido a bandidos. Los nacionales recogieron un aluvión de voluntarios y los integraron rápidamente en el ejército, mientras que los voluntarios opuestos funcionaban como milicias irregulares de partidos y sindicatos. Combatientes de este tipo solían ser ejecutados sobre la marcha en las intentonas comunistas de Alemania, y Azaña había ordenado fusilar a los anarquistas a quienes se pillasen con armas en la insurrección del Alto Llobregat. No quiere decir que en la guerra civil todos fueran fusilados, ni mucho menos, pero bastantes sí lo fueron.
Según avanzaban desde Sevilla, las tropas nacionales iban comprobando crímenes espeluznantes de los milicianos, como familias enteras quemadas vivas, crucifixiones, castraciones, etc. Y la justicia era drástica, sobre la marcha: se ponía a los prisioneros ante la gente y se preguntaba: “Este, ¿bueno o malo?” Si los testigos le acusaban de haber participado en los asesinatos, era ejecutado, de otro modo salvaba la vida. Los crímenes cometidos por las milicias en Badajoz y aledaños fueron desde luego muy graves.
Entre los cadáveres de Badajoz es imposible distinguir los que cayeron en la lucha y los fusilados. Un corresponsal presente por aquellos días, el francés J. Berthet, habló de 1.500 ejecuciones, cifra repetida por el corresponsal M. Dany y otros, aunque desde luego ninguno los contó y en algún punto concreto uno habla de “unas decenas” y otro de varios centenares. Berthet estaba ligado al servicio de propaganda comunista dirigido por el célebre Willi Münzenberg, que influía en una variedad de medios de información o deformación de tinte “progresista”, por lo que sus crónicas eran vastamente reproducidas, y aun exageradas por muchos periódicos. Los Angeles Times citaba “2.500 cuerpos apilados en las calles de la ciudad”. Según otra crónica transmitida por la Associated Press de Lisboa, “Corrieron torrentes de sangre en la ciudad, de la cual no queda piedra sobre piedra”, con relatos truculentos al estilo de los de Allen. A raíz de unos datos demasiado claramente manipulados, Berthet sería expulsado de Portugal.
Por no alargarnos, quien quiera informarse con veracidad de lo ocurrido en Badajoz debe leer obligatoriamente el libro de Pilo, Domínguez y La Iglesia, que dudo pueda ser superado. En cuanto a los fusilamientos, las cifras más aproximadas las da A. D. Martín Rubio, recurriendo al registro civil de Badajoz. El total en diez años, hasta 1945, asciende a 1.080 muertes, de las que algo menos de 500 corresponden al verano y otoño de 1936. Hoy por hoy, son las cifras más fiables y comprobables. Por lo demás, los del Frente Popular asesinaban prisioneros con gran liberalidad, aparte del terror de retaguardia, cuya culminación cuantitativa lleva el nombre de Paracuellos.
En suma: la famosísima matanza de la plaza de toros no existió, la toma de la ciudad fue cruenta para ambos bandos y dejó bastantes muertos en las calles, los milicianos y otros izquierdistas habían cometido numerosas atrocidades, y los fusilados en aquel verano-otoño ascienden a medio millar aproximadamente. Y, sobre todo, no se trató de una lucha entre fascistas y demócratas, entre golpistas y defensores de un gobierno legítimo, entre “el pueblo trabajador” y los parásitos que pretendían mantener sus privilegios. Fue una lucha entre a los partidarios de disgregar España y arrasar su cultura cristiana y tantos otros aspectos de la civilización europea y los que defendían precisamente esas cosas. Lucha entre los que habían asaltado en 1934 y destruido en 1936 la legalidad republicana y los que no se resignaban a la tiranía revolucionaria.
Es evidente que falsedades como las de la matanza de Badajoz no son inocentes ni producto de una indignación moral mal informada. Se difunden calculadamente porque suponen beneficios políticos y a veces también económicos para determinados partidos y personas. Pero el coste social es enorme. La opinión pública es emponzoñada con odios y la propia política se convierte en una farsa siniestra que vuelve a amenazar nuestro porvenir. La estupidez y la canallería, como diagnosticó el liberal Marañón.
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“Los méritos de Franco siempre excederán cualquier estimación, tanto de sus partidarios como de sus no partidarios” Buena tontería beata ese “siempre”. ” Pero mejor ser partidario que no serlo” Eso depende, la tontería de muchos partidarios facilita las cosas a los contrarios. Y aquí no se viene a discutir con frases rimbombantes, téngalo en cuenta.
Otra “matanza” favorita de la charlatanería es la de “La desbandá”, la huida de Málaga a Almería (unos 220 kilómetros) de 8.000 milicianos acompañados de familiares y gente diversa, cuando Málaga cayó en manos de los nacionales. Es normal que huyeran, porque en los meses que dominaron la ciudad, las izquierdas perpetraron atrocidades sin cuento, y tenían la sensación de que no iban a quedar impunes al llegar sus enemigos. Según la versión propagandística, aquella “pobre gente” fue hostigada desde el mar con bombardeos de la flota franquista, que le habría ocasionado un número de muertos estimable según preferencias de los autores. Sin embargo existió un informe oficial del propio frente popular que no habla de tal cosa, sino de muertes por hambre y agotamiento. El único testimonio de los supuestos bombardeos fue el del médico comunista canadiense Norman Bethune, que no había salido entonces de Almería, y que sería expulsado tiempo después de la Cruz Roja por “conducta inapropiada” conlas enfermeras, según explicó en el Parlamento el catedrático de filosofía del Derecho y diputado por VOX Francisco José Contreras.
Sobre la entrada del euro ya comentamos varias veces lo que ha significado para la economía española. Antojo y capricho de Aznar que se opuso a las advertencias que varios economistas le hicieron en su día. Política cortoplacista y caprichosa, sin escrúpulos y sin visión de Estado ni con vistas a los intereses nacionales. No se debió entrar en el euro sin antes acometer sin complejos las necesarias reformas de la economía española, que es lo que le dijeron los expertos a Aznar a los que no hizo ni caso. A todo esto se añade que el euro estaba y está diseñado para favorecer enormemente los intereses de Alemania. Lo más gracioso de todo esto es que muchos españoletes dicen, en momentos de crisis eso de “menos mal que estamos en Uropa”….o “menos mal que estamos en el euro”….sin darse cuenta estamos como estamos gracias en buena parte a Uropa y al euro.
https://elblogdekufisto.blogspot.com/2022/07/dios-sonia-no-vas-mirarme.html
Muy resumido, para un tuit:
La “Matanza de Badajoz” fue inventada por Jay Allen, de Usa; “la Desbandá de Málaga” por el canadiense Norman Bethune; y Guernica por el inglés George Steer: periodistas anglosajones todos. ¡Ojo a la propaganda anglosajona antirrusa! En https://piomoa.es/?p=18392 /
@fjconpe
@vox_es
Yo no hago frases rimbombantes. Las hará usted.
Y lo de siempre no es ninguna tontería beata. Es una forma de expresar mi admiración. ¿Qué pasa, que todo lo que no dice usted son tonterías o qué?
Y los partidarios de Franco no somos tontos. Al menos, no todos.
Yo no he venido aquí a discutir con nadie, y menos con usted. No me gusta discutir por gilipolleces. Si a usted no le gustan mis comentarios, “ignórelos” y ya está. Vamos a dejar esto ya, por favor.
Y de lo de la puñetera Unión Europea, ¿qué?
La UE y la zona euro no son coincidentes ya que hay países como Polonia o Dinamarca que pertenecen a la UE y tienen su propia moderna. No se ha dado todavía que expulsen a ningún país del euro pero si ocurriese supongo que también desaparecería el euro tal y como lo conocemos. Lo que no está tan claro es si habría dos monedas distintas, una para los países ricos ya otra común a los países con problema de deuda como España o si cada,uno tendría que volver a su moneda. No creo que haya en plan todavía ni España ni en la UE sobre este caso.
VOX se ha abstenido en la votación de investidura de Moreno Bonilla como presidente de la Junta de Andalucía y
Olona celebra que con Moreno al frente de la Junta arranque el «Gobierno fuerte que Andalucía necesita»:
https://okdiario.com/andalucia/olona-celebra-que-moreno-frente-junta-arranca-gobierno-fuerte-que-andalucia-necesita-9438469
Vaya con Gerald Howson. ¿Otro supuesto inocente hispanista británico? Pocos han abordado el problema de Gibraltar en sus investigaciones. Cuando llegue ese dia, servidor los empezará a tomar en serio.
Noto una cierta corriente en VOX que se dirige a “corregir” el error de Andalucía que consiste en acercarse al PP y hacerse “su amigo” o algo parecido. Si caen en la trampa que muchas veces advierte Moa, VOX está perdido. Debe acentuar sus diferencias con los demás partidos, incluido el PP. No hace falta caer en lo histriónico, la queja constante o la ocurrencia, sino proponer, criticar con fundamento y contundencia y ofrecer una alternativa, no un apoyo a Pujoliño. Es lo que yo creo más acertado.
Cuánto más tarde se celebren las próximas elecciones, más se acercará la coalición PP+VOX a esa mayoría política de 3/5 en el parlamento. Los grandes cambios en la política española vendrán por esa vía, la de reformar la Constitución.
¿Llegará la situación política a deteriorarse tanto que alcanzaremos esa cifra?
Parece ser que ya estamos en un regimen de terror y de Gestapo:
El espeluznante relato del perito que destapó los falsos abusos sexuales: “Hay talibanes de género haciendo periciales”
El TSJA ha condenado a Servicios Sociales por certificar falsos abusos de un padre divorciado a su hijo que pasó más de 3 años en prisión preventiva.
“Me impactó la brutalidad con la que se trató a esa criatura de apenas 8 años. La mujer se levantó y dio un manotazo en la mesa que tembló todo. El niño, tremendamente asustado, se echó para atrás y ella volvió a la carga… ¿Me vas a decir tú a mí que tu padre no te mete la pija por el culo? Literal. Yo no daba crédito”, reconoce.
Aquel episodio se reprodujo durante el juicio. Tras aquella frase, Bronchal mandó parar el vídeo: “A partir de este momento, todo lo que diga el niño ya no tiene ningún valor, absolutamente ninguno, porque ya no vamos a poder distinguir si lo está diciendo por miedo, porque es fruto de la inducción o si lo ha vivido. Es decir, han destruido la prueba”. Y eso por no hablar del aspecto humano. “¿Se puede tratar un niño de esta manera? -se pregunta el psicólogo forense aún perplejo al recordar aquel episodio-. Yo creo que hasta la Gestapo tenía métodos más elegantes.
https://www.libertaddigital.com/espana/2022-07-24/espeluznante-relato-de-julio-bronchal-perito-que-destapo-falsos-abusos-sexuales-talibanes-de-genero-haciendo-periciales-6918555/
No truena los dedos gratuitamente.
La chica hace lo mejor que puede para que nos demos una idea de cómo sonaba el inicio de la Ilíada.
https://www.tiktok.com/@simmiasofthebes/video/7108268593418079493?is_from_webapp=1&sender_device=pc&web_id=7122830743713105413
Me pregunta una señora por qué la cultura en España parece estar en manos de la izquierda. “Porque la derecha en España, tradicionalmente, solo entiende de dinero. Y tampoco entiende mucho de eso”
“Si la ambición de VOX es llegar a gobernar con el PP, será tragado por el PP. Habrá que ver qué resulta de la colaboración en Castilla-León, si es que resulta algo”.
https://youtu.be/PyxKssjWHSE
Si la gente no entiende bien qué es lo que distingue a VOX del PP, votará al PP como voto más útil, o simplemente útil
Tenemos delante nuestra una de las mayores crisis a la que el mundo occidental se ha enfrentado. La guerra de Ucrania no es solamente una guerra militar entre ucranianos y rusos, es algo más. De momento, Europa está más cerca del apocalípsis económico que Rusia, extremo este que muchos economistas constatan. Vamos a tener un otoño bastante movido. La deuda pública de Italia y España, por ejemplo, van a colocar a la Unión Europea en una situación más que embarazosa. Todo este contexto histórico, económico y social no va a favor de los actuales gobernantes, llaménse Draghi, Boris Johnson o Pedro Sánchez. Así que emulando a Francisco Franco cuando dijo aquello de: “no hay mal que por bien no venga” cuánto mayor sea la crisis económica, mayor será el descontento social y por lo tanto las diferencias electorales. Algunos analistas electorales ya barajan la posibilidad de que el tándem,PP-VOX, se acerque a la barrera de los 200 diputados. Estas cifras serían algo impensable hace unos años, pero a la vista de la que está cayendo ahi fuera, con una inflación galopante, basta que el litro de gasoil se dispare a los tres euros, como es previsible a final de año, para que veamos escenarios electorales impensables hace décadas, para algunos muy gratificantes. Cuánto mayor sea la crisis económica, más cerca estaremos de la barrera de los 200 diputados y por tanto de esos 3/5. El escenario próximo ante el que se enfrenta la actual clase política española es de una verdadera catástrofe económica.
210 diputados, son 3/5 de la mayoría del Congreso de los diputados. Es el gran objetivo, que muchos llevamos esperando hace mucho tiempo , para hacer los grandes cambios. Para eso es fundamental el concurso de VOX. Y repito, a grandes crisis, grandes soluciones. Así que, démosle las gracias al Doctor por los servicios prestados a la patria.
Vaya, que la viruela del mono ya es un problemón.
Por supuesto, el “gran objetivo” de sustituir al Dotor por el Pujoliño o similares, ha sido siempre el designio del PP. Claro que no lo quieren sustituir para nada, faltaría más, sino para hacer “grandes cambios que el país necesita”, como Aznar (este sí que los hizo, abriendo paso a ZP y el Dotor) o como Rajoy. Y para eso VOX debe ir como auxiliar, faltaría más. Y si se envuelve toda esa farfolla con los de “apocalipsis” de “Europa”, ya es que hasta los corazones más endurecidos se ablandan.
Ante el panorama de una gran crisis económica toda la realidad política se va a concentrar en lo económico. En esta situación un gobierno del PP y VOX, aunque superen los 200 escaños, no va a cambiar nada importante porque ni ellos lo consideraran importante ante la premura de los asuntos económicos. Habrá que ver quees lo que hace en esta situación de crisis la izquierda, si se dedica a calentar la calle con huelgas o se comporta más moderadamente. Lo positivo de estas crisis es que si son muy profundas cambian el panorama por completo. En esas situaciones no es que tengas que plantearte si salir del euro, es que te van a echar del euro, no te tienes que plantearte si quitar o reducir las autonomïas es que los que te presten algo de dinero te van a obligar a hacerlo, ya no se trataría de asuntos que se discuten internamente en España sino que la situación geopolítica puede obligar a hacer estos cambios que si por la clase política fuera no se harían nunca.
Aquí tenemos al típico votante de derechas, el tal Nautilus que aspira a que todo vaya mal, y si es cada vez peor, mejor, para heredar la ruina socialista, gestionarla y hacerla endémica. ¡¡Ah!!…y que VOX acompañe al PP en la ignominia, que así se hace más creíble…..
Dice el tal Nautilus:
210 diputados, son 3/5 de la mayoría del Congreso de los diputados. Es el gran objetivo, que muchos llevamos esperando hace mucho tiempo , para hacer los grandes cambios.
Pues aquí voy a suscribir la pregunta de Aznarin cuando preguntó ¿Para hacer el qué?……Nautilus dice que “grandes cambios” A saber en qué consisten. Tal vez en nada ni él lo sabe. Sólo la “gestión” de marras. El PP tuvo 180 para cambiarlo todo. No hizo nada. Con 210 menos aún. Así es el votante de derechas peperín. El PP le ha estafado mil veces, y aspira a que le estafe 1000 más.
Tiene razón Manolo, porque se ha reducido todo a lo económico en la derecha. La izquierda sabe mejor de qué va la cosa y por eso no se la ha derrotado como debería. Lo peor es que la derecha se quiere identificar con un “liberalismo” pobre, simplón, demagogo y a la vez práctico y cortoplacista, sin enjundia intelectual por lo que cae en más socialismo y en gestiones mediocres. Sin calado. La libertad individual, eje fundamental del Liberalismo no sólo se basa en lo económico sino en algo superior. Lo explica muy bien Contreras: “La libertad individual no es un Fin, sino un medio”. Y la economía no lo es todo, sino un instrumento, no un Fin. Esto no lo entiende la derecha y así la va.
Esa es la razón de ser de VOX en la política española, cambiar el régimen del 78 en la dirección adecuada. Menos competencias autonómicas, recentralizando el estado; más independencia de los tres poderes reales del estado y como corolario, mucha más transparencia en la gestión pública. Con eso arreglamos de un plumazo las veleidades separatistas de catalanes y vascos. Así podrán descansar tranquilos, los artífices del régimen del 78.
La mayoría del PSOE del año 1982, 202 diputados se consiguió en un contexto muy parecido al actual.
Para que lo que plantea Nautilus fuera viable la mayoría de esos 200 escaños deberían ser de VOX y el PP servir solo de apoyo.
La oferta de Olona al Nocilla parece querer hacer de VOX un auxiliar cel PP, el cual ya es auxiliar del PSOE y separatistas. Así la cadena quedaría completa. Es lo que propone Nautilus fingiendo que entre VOX y el PP podrían cambia no sé qué historias y que no se ha enterado de la historia del PP.
Volcán en Japón
https://youtu.be/TDAQ5e31tIs
Viñas llegó a ser un funcionario franquista en puestos de confianza (de libre designación) bien retribuidos, pero oportunamente se descubrió, como tantos, antifranquista hasta la médula y se aproximó al PSOE de los “cien años de honradez”, cuya heroica lucha contra el franquismo está por escribir y seguramente siempre lo estará. Como miembro del siempre honrado PSOE, cuando este llegó al poder, pasó a desempeñar importantes cargos económicos y políticos. En su biografía demostró, como cabe observar, una notable perspicacia, por lo demás no infrecuente desde la transición y poco antes. Lamentablemente, cuando pasó de la mera evolución biográfico-política al estudio de la historia, su perspicacia se transformó en una indigesta y arbitraria garrulería, por lo demás muy común en ámbitos más o menos intelectuales. He aquí una muestra, y veremos otras.
Nunca me ha gustado subrayar ni hacer anotaciones en los libros según los voy leyendo. Es costumbre en muchos. En mi no. En algunos libros si lo hago, subrayar, muy poco, frases o conceptos importantes. Es lo inusual. Y lo hago con una linea fina a lápiz. Esta vez lo he hecho en el de Moa de Hegemonía española. Algunos contenidos me parecen importantes. Uno de ellos ha sido en la introducción cuando Moa dice que la sociedad española capaz de realizar las hazañas de los dos siglos de hegemonía con grandes virtudes, ímpetu social, militar, político, moral, etc. “nació” con los Reyes Católicos. Me pareció incorrecto el término “nació” porque daba a entender en un principio, que fue casi espontáneo, que surgió con los Reyes Católicos. Antes de “nacer” hay un tiempo largo de gestación creo entender finalmente. Con los Reyes Católicos sale a al luz, se da forma final ese potencial de la sociedad española gestado durante la Reconquista y en tiempos pasados. Creo entenderlo así con lo que “nació” es correcto. Acertado.
Y si no me equivoco, en su anterior obra sobre la Reconquista incide en esto, en la gestación. ¿Me equivoco?
Un político del PP, Pedro Corral, se ha creído en el caso de instruir a sus colegas, desde el diario ABC, sobre lo que fue la guerra civil. Buena intención, aunque temo que él mismo no demuestre tener mucha idea al respecto, cosa muy común en nuestros políticos. Algunos nos hemos empeñado en investigar y desentrañar las motivaciones y mecanismos de aquella guerra de tanta trascendencia en España y fuera de España, pero según el señor Corral no hacía falta tanto esfuerzo. La cosa fue de lo más sencillo: a unas mínimas minorías (“canallas y sádicos sayones” les llama sádicamente Pedro J Ramírez) les dio un buen día por matarse entre ellas y de paso arrastrar malamente a millones de personas que solo pasaban por allí y no tenían el menor interés en luchar por nada. Así de facilito. El pensamiento y análisis, sustituido por simplezas envueltas en moralina de barra de bar.
Para justificar su llamémosla tesis, Corral “descubre” que las fuerzas militares de ambos bandos fueron engrosadas mayoritariamente, desde las primeras semanas, por la recluta forzosa. Las imágenes de millones de aguerridos milicianos y falangistas, dice, serían solo pura propaganda. Corral no sabe que lo común en las guerras es que los soldados sean mayoritariamente de recluta, lo que no implica que vayan necesariamente “a la fuerza”. Y lo de los millones de milicianos y falangistas, nadie lo ha dicho nunca, Corral se lo inventa para pasar por desmitificador. Pero sí surgió desde el primer momento un número extraordinariamente alto de voluntarios en los dos lados, no millones, pero sí decenas e incluso cientos de miles. Con ellos, básicamente, Franco pudo haber ganado la guerra en cinco meses (el profesional Ejército de África era muy voluntario) aunque empezara pronto a movilizar quintas. Y los rojos pasaron a regularizar el ejército porque los voluntarios, con todo su entusiasmo, rara vez tienen el orden y la disciplina precisos.
Por lo tanto, afirma, el factor clave de la inmensa mayoría de los soldados fue “la lealtad geográfica”. De ese supuesto gratuito ( que habría asegurado la victoria del Frente Popular, que en un principio dominó más “geografía” y población), deduce Corral que la inmensa mayoría de los combatientes no tuvo libertad para elegir bando. “Factor clave”, llama a esta perogrullada, pues claro que cada bando aplicó la ley en su zona. Pero la gran mayoría de los españoles ya había elegido bando en las elecciones brutalmente radicalizadas de febrero de 1936. Y embrolla más la perogrullada: soldados de izquierdas reclutados en el Ejército franquista tuvieron que combatir contra soldados de derechas enfilados en el Ejército Popular. Cierto, pero el grueso de los soldados se identificó con el bando en que luchaba, bastantes procuraron pasarse al contrario y bastantes lo consiguieron. Otros más fueron fusilados por negarse a servir en el bando “geográfico”. Por cierto, al terminar la campaña del norte, los nacionales integraron en sus filas a la mitad de los 200.000 prisioneros, que no dieron ningún problema.
Sin embargo, informa nuestro historiador, muchos siguen pensando que un campesino pobre, sin ideas políticas, reclutado por Franco, será siempre un fascista, mientras que otro campesino pobre, sin ideas políticas, reclutado por Azaña, será siempre un antifascista. De nuevo la osada ignorancia. Azaña pintó poquísimo en la guerra y nunca reclutó a nadie; fueron los partidos obreristas, sobre todo el comunista, quienes impulsaron la recluta masiva. Entre los campesinos pobres de Extremadura y Andalucía predominaban los anarquistas y socialistas, mientras que los de Galicia y Castilla solían ser de derechas. Si el señor Corral hubiera estudiado un poco la época, sabría que la politización era extrema, con los odios correspondientes, y que no había mucha gente sin ideas políticas, aunque fueran muy primarias.
Cree Corral que las quintas reclutadas durante la contienda por ambos bandos deberían haber sumado 5 millones de hombres, pero que solo se reclutaron la mitad de lo que deduce que la mitad consiguió “escaquearse” y evitar “ir al frente”. ¡Maravillosa lección! Pero suele considerarse que el máximo movilizable de una población, salvo casos excepcionales, asciende al 10-12% de los varones. Y esa proporción fue la efectivamente movilizada entre nacionales y rojos (1.3 millones los nacionales y 1,7 los rojos, según R. Salas Larrazábal). Y de ellos solo una fracción va al frente pues un ejército tiene una enorme cantidad de servicios que normalmente quedan en retaguardia. Y otra gran cantidad de adultos ha de permanecer manteniendo las fábricas, los campos y la administración del estado.Ignora además el señor Corral que la guerra de España no fue de gran intensidad comparada con otras muchas civiles y no civiles del siglo XX (puede ver alguna comparación en Los mitos del franquismo), que los muertos en combate no fueron muchos (en torno a 160.000 entre ambos bandos; la guerra civil useña en el siglo XIX causó más del doble para una población poco mayor), y que la mayoría de los frentes tuvo poca actividad la mayor parte del tiempo. Tampoco la movilización fue tan profunda que obligara a emplear masivamente a mujeres en fábricas y campos para suplir a los hombres, como ocurrió en la guerra mundial, por ejemplo.Un historiador debiera informarse bien antes de dar lecciones. Al señor Corral le asombra agradablemente que hubiera desertores. Los hay en todas las guerras. La cuestión es cuántos y en qué proporción en cada bando. Habla de “miles” y seguramente los hubo, unos para pasarse al otro lado y otros, los menos inteligentes, para irse a casa, donde serían encontrados enseguida; mientras sugiere la cifra de 2,5 millones entre desertores y escaqueados, que él imagina debían haber ido al frente (Comparados con este simplón, los charlatanes de izquierda que vamos desgranando en este blog resultan casi unos linces. Pero es el nivel intelectual del PP, una vez más). Pese a tan enorme número de supuestos desertores, nos indica que los castigos a ellos eran terroríficos: se ve que no ponían mucho empeño en aplicarlos. Según él, en el bando nacional se detenía a los familiares del desertor y se confiscaban sus bienes, y si los familiares tenían antecedentes izquierdistas era probable que acabaran fusilados. Nunca había oído ni leído yo tal cosa, pero si fue así, las víctimas deberían contarse por cientos de miles, incluso millones de acuerdo con las gansadas de este exponente del nivel del PP. Tendría interés que el señor Corral nos aclarase cuántas fueron. Fue en el Frente Popular donde los reglamentos llegaron a hacerse terroristas, como ha explicado R. Salas Larrazábal, a quien el señor Corral debiera leer con atención antes de ponerse a enseñar a sus colegas de la política, quizá un poco menos ignorantes que él mismo.Pero obsérvese que el simplón pontifica nada menos que en el ABC, lo que indica tanto…
”Ni para defender la República ni para atacarla hubo mucho entusiasmo entre los españoles de a pie”, viene a decir. Por supuesto. Como que la república, es decir, la legalidad republicana, había fenecido con las elecciones fraudulentas de febrero del 36. Lo que había era un nuevo régimen revolucionario. Y es cierto que, pasados los primeros meses, decayó mucho el entusiasmo por defenderlo, pero, aunque no lo crea el señor Corral, ocurrió algo muy distinto en el otro bando. Lo demuestran sus numerosos actos heroicos en condiciones casi imposibles, actos inexistentes en el Frente Popular: Gijón, Toledo, Sta. María de la Cabeza, Oviedo, Huesca…a los que desprecia el político porque no entran en la nómina de supuestos desertores y escaqueados que tanto le complacen.
Antes de los Reyes Católicos tanto Castilla como Aragón estaban en un proceso de guerras civiles e inestabilidad, que pudo haber acabado en una balcanización completa del país.
Así, dureza de la buena a esos payasetes del PP. Qué nivel madre mía. De lo más gracioso ha sido lo de los campesinos reclutados por Azaña. Esto es ya para revolcarse de risa por el suelo.
Si la gente no entiende con claridad cuál es la diferencia entre VOX y PP, o piensa que son cuestiones de matiz, considerará siempre más útil votar al PP
Reducción del 15% del gas
https://youtu.be/UDpSDykT6KM
“Es más peligroso porque en su camino, las llamas se encuentran más cantidad de ramas y malezas que no deberían estar allí, lo que le sirve de combustible para avanzar más rápido y destruir más.”
¿Había significativamente menos maleza el año pasado , hace dos, hace tres o hace cuatro o más años?
¿Había amás maleza en los ochentas, cuando llegaron aarder más de cuatrocientasmil hectarias en cada uno de varios años?
¿Había más maleza en los ochentas, cuando llegaron aarder más de cuatrocientasmil hectarias en cada uno de varios años?
¿Que sería de nuestros bosques explotándolos para biomasa habida cuenta de que cuando teníamos muchos menos habitantes y consumíamos muchísima menos energía percápita, gran parte de Españestaba muy desforestada a base de explotar leña y de apacentar extensiva y/o transhumantemente rumiantes?
Añádase que calificamos de bosque incluso lo que a ojos de habitantes de países oceánicos lluviosos no merecería nombre sino de extensión rala de arbustos y de arbolcejos.
Que nadie pudiese beneficiarse económica ni climaticoalarmistamente de incendios forestales y que ninguna hectárea de bosque quemada fuese dedicable sino a la clase de bosque que tenía sería crucial siendo que son intencionados la mayoría de incendios.
Contreras a la altura del betún ha rebajado su talla intelectual e ideológica a propósito de lo de Ucrania.
Añádase que calificamos de bosque incluso lo que a ojos de habitantes de países oceánicos lluviosos no merecería nombre sino de extensión rala de arbustos y de arbolcejos.
Te equivocas Nebredo. Sigue siendo bosque o monte. Los arbustos y arbolcejos (sic) tienen nombre científico y popular y muchos de ellos son muy útiles y sirven para la industria o nos ofrecen recursos. Uno de esos arbustos es el Boj cuya madera se usa mucho en España. Y si no son arbustos pueden ser plantas como la gayuba, bledo, hinojo, cardos de diferentes tipos, menta, etc…..No es apropiado despreciar lo que se quema aunque no lo consideres “bosque” sí lo es. En España tenemos una riqueza natural superior en muchos aspectos al resto de Europa.
Contreras a la altura del betún ha rebajado su talla intelectual e ideológica a propósito de lo de Ucrania.
En eso, sí. En el resto sigue siendo superior a los demás. Y eso que sigue refiriéndose como República a lo que es Frente Popular. Abascal se ha dado cuenta y ya no mete la pata y el propio Contreras se corrigió en su última intervención.
Nuevo hilo